La enfermedad renal crónica es una de las causas principales de muerte en México.
De acuerdo con diversos estudios realizados en México existe una prevalencia de enfermedad renal de 12.2 por ciento y una tasa de 51 defunciones por cada 100 mil habitantes; en la mayoría de los casos, este padecimiento se puede prevenir al estar relacionado directamente con la hipertensión y diabetes mal controladas, así como de obesidad.
La familia es una red de apoyo emocional para enfrentar esta enfermedad. Hablamos de un padecimiento que no presenta síntomas en los primeros estadios (1,2 y 3); sin embargo, cuando el paciente ya tiene un daño renal con un funcionamiento de sus riñones menor al 15% se pueden presentar signos como espuma en la orina, fatiga, cansancio extremo, hinchazón de pies, entre otros.
En esta etapa, y bajo la indicación médica del Nefrólogo, lo recomendable es que el paciente reciba cualquiera de las terapias sustitutivas que existen como hemodiálisis, diálisis peritoneal y trasplante renal. Esto, por supuesto, tiene sus retos, ya que el paciente enfrenta diversos desafíos emocionales debido a la naturaleza crónica de la enfermedad y sus implicaciones en la calidad de vida.
Nos referimos a la ansiedad, depresión, estrés y carga emocional, pérdida de la autonomía y la calidad de vida, sentimientos de culpa, vergüenza, miedo a la muerte y a la pérdida. Así, cuando un paciente es diagnosticado (a) con este padecimiento, no solo se ve afectado(a), sino también, su círculo más cercano, incluyendo la familia. Este círculo conforma una red de apoyo, integrándose por 3 elementos:
- Paciente
- Familia
- Equipo clínico
En este sentido, la familia desarrolla un papel fundamental que inicia con la aceptación de la enfermedad, ya que se presentan cambios drásticos como el estilo de vida, los hábitos de alimentación, así como la rutina de vida en ambas partes.
¿Cómo apoya la familia al paciente con enfermedad renal crónica?
La familia juega un papel fundamental en el apoyo emocional, el cuidado físico y la promoción de un estilo de vida saludable para los pacientes renales.
Su apoyo puede marcar la diferencia en la vida de estas personas y ayudarles a llevar una vida plena y satisfactoria a pesar de su enfermedad.
Ante situaciones críticas como la aparición de la enfermedad crónica en un miembro, la familia puede brindar soporte de diferentes formas, por ejemplo:
- Apoyo emocional. Los miembros de la familia pueden ofrecer palabras de aliento, escuchar sus preocupaciones y ayudarles a manejar el estrés emocional.
- Cuidado físico. La familia puede ayudar en las tareas diarias como la administración de medicamentos, el seguimiento de una dieta específica y el cumplimiento de las recomendaciones médicas.
- Promoción de un estilo de vida saludable. Se alienta a seguir una dieta renal adecuada, fomentar la actividad física regular y evitar hábitos dañinos como el consumo de tabaco o alcohol.
- Participación en el equipo de atención médica. La familia puede acompañar a las visitas médicas, hacer preguntas pertinentes, llevar un registro de los síntomas y ayudar a tomar decisiones informadas sobre el tratamiento.
- Fomento de la adherencia al tratamiento. Los familiares pueden recordarle la toma de medicamentos, apoyar su seguimiento de la dieta y asegurarse de que asista a las citas médicas y a las sesiones de diálisis si es necesario.
Este soporte es estratégico, ya que contribuye en la sensación de sentir seguridad en sí mismo, diferente a ser sobreprotegido; también, es importante que la familia motive a su paciente a realizar actividades por sí mismo en la medida que las pueda hacer, no que lo limite aún teniendo la capacidad, si no estaría generando lo contrario, dando un mensaje de incapacidad, de dependencia total o minusvalía.
5 formas de cuidar su salud mental
Como lo mencionamos anteriormente, cada paciente enfrenta diversos retos emocionales cuando es diagnosticado con ERC y recibe alguna de las terapias sustitutivas.
Por ello, es indispensable practicar algunos ejercicios muy simples pero poderosos que ayudarán a sentirse mejor. Estos pueden ser:
- Hablar con alguien de confianza
- Realizar actividad física
- Descansar bien
- Hacer lo que más le gusta
- Tener un mal día no lo convierte en una mala persona
Por algo se empieza, pero estamos seguros que esto le ayudará a sentirse mejor cuando se sienta sin mucho ánimo o cuando se sienta solo.
Salud emocional en el tratamiento del paciente renal
El concepto Calidad de Vida Relacionada a la Salud (CVRS) engloba varias dimensiones y se basa en la percepción que el paciente tiene de sí mismo, de su bienestar e intervienen factores como el médico, es decir, su asistencia sanitaria, el uso de medicamentos, la presencia del dolor, la percepción de la salud en general; También engloba su ejercicio laboral o actividades cotidianas en casa, afectación sexual, así como la forma en cómo se relaciona con la familia y con su círculo social, de amigos, y el estado económico ahora con la enfermedad.
Cuando surge la negación de la enfermedad se corre el riesgo que se vuelva tema tabú no sólo en el paciente, sino también en la familia. En este sentido, el reto que tienen los profesionales de la salud es que la ERC se debe incluir en el discurso cotidiano, con el objetivo de vivir la enfermedad más “amigable”.
Es esencial que los pacientes con ERC reciban apoyo emocional, ya sea a través de la terapia de apoyo, de la familia y amigos o grupos. La atención integral, que aborda tanto los aspectos físicos como emocionales de la enfermedad, puede ayudar a los pacientes a enfrentar y superar estos retos emocionales.
Es importante mencionar que, dependiendo la perspectiva con que se tome a la enfermedad entre el paciente y la familia, se puede brindar la oportunidad de conocerse entre ellos, de apoyarse, de aclarar o resolver conflictos si los ha habido e incluso hasta de perdonar.
Información Validada por:
Licenciada: Cecilia Hernández
Especialidad: Psicología
Cédula: 2542685