Los profesionales de Nutrición en pacientes con enfermedad renal crónica (ERC) tienen la responsabilidad de enseñar al paciente qué es lo que debe de comer de acuerdo con sus características como el peso, estatura, el estadio en el que se encuentran de la ERC y si se está en terapia de hemodiálisis o diálisis peritoneal, comentó el equipo de especialistas en Nutrición de Médica Santa Carmen durante su participación en los espacios de Grupo Milenio, Radio Cañón y EXA FM con motivo del Día del Nutriólogo, celebrado el pasado 27 de enero.
“Sabemos que estamos bombardeados por la industria de los alimentos. Es difícil quitar los alimentos que causan adicción como los refrescos, frituras, etc, y son algo que no debemos consumir con o sin la enfermedad (ERC). La mejor opción siempre serán los alimentos que sean frescos, lo más natural posible como verduras o frutas; si vamos a consumir pollo que no sea procesado”, comentó la Dra. Geovana Martin, Gerente de Nutrición en Médica Santa Carmen, durante su intervención en radio.
Para los pacientes con enfermedad renal crónica en estadios que no requieren de diálisis se necesitan prescribir proteínas dependiendo del porcentaje de función del riñón, es decir, de la función renal; es cierto que hay proteínas que generan menos toxinas que otras; sin embargo, si éstas proteínas no son bien prescritas y sobre todo, si no existe una educación nutricional, los objetivos de la terapia nutricional como mejorar la calidad de la alimentación y mantener un buen estado nutricional se verán afectados.
De acuerdo con lo reportado por la literatura científica se ha calculado una prevalencia mundial de desgaste proteico energético del 28%-54%, lo cual concuerda con los datos del equipo de Nutrición de Médica Santa Carmen, el cual señala que la prevalencia calculada para la población fue del 33%.
En este sentido, las especialistas en Nutrición compartieron algunas estrategias nutricionales para los pacientes que se encuentran en terapia sustitutiva como hemodiálisis o diálisis peritoneal.
- Incrementar el consumo de proteína de tipo animal o vegetal como pollo, pescado, frijoles, habas, lentejas, garbanzos.
- No restringir el consumo de frutas y verduras a menos que el profesional de la salud lo considere necesario. Las restricciones innecesarias pueden incrementar el riesgo de que los pacientes se desnutran.
- Disminuir el consumo de sodio. Esto incluye disminuir el consumo de sal de mesa, productos industrializados, procesados, enlatados y todo lo que no sea natural. Si no se restringe de manera inicial el consumo de sodio los pacientes serán propensos a tener presiones arteriales y ganancias de peso entre sesiones de diálisis descontroladas.
- Acudir con un profesional de la nutrición para ayudar a los pacientes a tener una correcta ingestión de nutrientes. Esto no se refiere solamente a la cantidad, si no a tener un buen equilibrio en el consumo de proteínas, carbohidratos y grasas, esto es esencial y dependerá de cada persona.
Asimismo, se hizo énfasis en la no restricción de los alimentos, ya que estos son una forma de medicina que deben ser prescritos y vistos como tal, como una medicina.
“Los seres humanos necesitamos energía, proteínas, carbohidratos y grasas, pero estas demandas de nutrientes dependerán de diferentes características como la edad, el sexo, el nivel de actividad física, las enfermedades diagnosticadas, entre otros”, agregó la Dra. Geovana Martin.
Las especialistas en nutrición de Médica Santa Carmen recomendaron tener un cuidado puntual de la salud, a través de la disciplina y autoamor; sea o no paciente con daño en el riñón, la gente debe comenzar con hábitos como la actividad física y una alimentación balanceada con el objetivo, entre otros, de reducir la probabilidad de padecer enfermedad renal crónica.
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